sábado, 20 de junio de 2009

Mi querido viejo.

Me acuerdo perfecto que cuando era chica mi papà a veces jugaba conmigo, agarrandome de las patas y dejandome colgada del sillon sin dejarme caer, me hacia gritar como loca muerta de miedo, recuerdo bien algunos buenos momentos que pasamos juntos, nunca fueron muchos, pero hubo un puñado que no escapan a mi memoria.
Mi papà, tan brusco, seco, callado, gruñon, desconfiado, nunca tuve miedo estando cerca de el, los miedos se evaporaban cuando me tomaba la mano, me sentia protegida bajo sus brazos musculosos.
Cuando trabajaba tarde y llegaba en la noche, lo primero que hacia era ir a mi pieza y a la de mi hermano para ver que estuvieramos bien y nos arropaba callado, era un rito de cada noche, el cree que yo nunca me di cuenta, pero lo esperaba con los ojos cerrados, esperando sentir ese cariño silencioso, ese gesto de amor sin palabras, no podia pedirle mas a un hombre con el alma adolorida por quedar huerfano tan joven, tan solo de cariño familiar, sin hermanos, abuelos, sin nadie que lo quisiera incondicionalmente, un hombre que habia fallado en su matrimonio, pero no en su papel de padre, èl, que prefirio quedarse a cargo de sus hijos sabiendo que el mundo se le venia encima, sin ayuda, sacò fuerza del aire y nos empujo a ser buenas personas, hizo de dos niños tristes, dos adultos fuertes y orgullosos.
Aprendi de èl sus virtudes y sus vicios, siempre me dijo que habia que probar para saber, asi evitaba que me engañaran, mis primeros tragos fueron robados de sus botellas, los primeros cigarros y pitos fueron sacados de su mueble. Es un vicioso empedernido pero responsable y me enseño que a veces no es malo andar por el camino oscuro si sabes el camino de regreso. Aprendi de èl a ver mas allà de todo, de las palabras y las sonrisas, a leer entre lineas y a descubrir algunas verdades escondidas sin siquiera preguntar, se encargo de agudizar mi ojo y mi mente desde niña y hoy se lo agradezco infinitamente.
Soy terca y orgullosa, tengo el genio maldito de mi padre y la lengua filosa, no me asusta decir las cosas a la cara y poner el cuerpo duro cuando la tormenta se acerca, como èl, no me hago a un lado para evitar los problemas, los enfrento con la frente en alto y el corazon lleno de esperanza.
Lo quiero tanto, tanto que el nunca podra adivinar el enorme amor que le tengo, nunca sabra cuanto lo sigo necesitando, no se lo digo, me equivoco en callarme, lo se, pero somos tan parecidos que en el fondo el debe intuir cuando me mira a los ojos que siempre hasta el dia que me muera el seguira siendo el hombre de mi vida, y yo su negrita, la niña pequeña que el consolaba cuando despertaba llorando por las noches llena de pesadillas.
Te extraño papà, mañana prometo abrazarte fuerte y hacerte saber cuanto te amo, agradecerte tu esfuerzo por criarme, darte muchos besos, tantos que alcancen para guardar unos pocos para cuando no estemos tan cerca. Gracias viejito mio de ojos tristes, te amo. Feliz dia!!!