domingo, 13 de marzo de 2011

Un año despuès.

Parece que en mi vida se ha hecho costumbre andar estresada por algo, nunca falta el problema. Cuando llegue de vacaciones andaba casi volando de lo relajada que quede, pero me duro la nada misma. De ahi en adelante no ha sido mas facil la cuestion.
Mi hijo entro a clases, a primero bàsico en un colegio nuevo, el primer dia yo diria que le fue bien, se quedo un poquito nervioso, pero me parecio normal, igual era un cambio grande para èl. El segundo dia empezo a quedar la caga, ya no queria volver al cole, no se queria levantar ni tomar desayuno. Ese dia cuando lo fui a buscar la tia me dijo que habia llorado en el recreo y que se lo habian tenido que llevar a enfermeria para que no se quedara solo. Lloro todo el rato, igual al segundo recreo y cuando termino la jornada. Por lo que me explico la profe, al enano le daba miedo quedarse solo, por eso cuando todos salian corriendo a recreo el no sabia que hacer y le daba miedo, lo mismo al salir, cuando no vio a la tia del bus retirarlo de la sala se asusto mucho mas, el acuerdo era que la transportista lo sacara de la sala personalmente, pero la vieja de mierda de la profe los bajo a todos a la entrada menos a mi hijo.
De ahi en adelante ha sido un verdadero martirio, llora apenas despierta y se va en el bus hasta con hipo de lo aterrado que anda, los recreos han sido puro llanto, por mas que las compañeras lo invitan a jugar o se quedan haciendole compañia, no hay caso, no se tranquiliza con nada. Hemos probado distintas formas de hacerlo entender que no le va a pasar nada malo, pero todos los intentos son inutiles, ya no se que mas prometerle, le he comprado disfraces, juguetes, le he hecho colaciones especiales para compartir, etc.
Me parte el alma verlo asi, tan vulnerable, èl siempre fue super entrador, nada le daba verguenza ni miedo, se adaptaba rapidito a cualquier situaciòn, hasta hace un año...
Pensando, dandole mil vueltas al problema me di cuenta de que el cambio empezo hace un año, ya no quiere quedarse solo, a cada rato nos llama solo para saber donde estamos, anda mas apegado y sensible. Hasta ahora no me habia caido la teja, despues del terremoto empezo a cambiar, yo pensaba que no se acordaba de nada o bien recordaba muy poco, porque la mayor parte del tiempo de viaje èl durmio, pero por lo visto no es asi, de a poco me voy dando cuenta que recuerda algunas cosas, el terremoto mismo, el tener que arrancar con lo puesto al cerro, el regreso y la reaccion de la gente alrededor. Lo cierto es que no habla mucho del tema, pero lo noto nervioso cuando ve noticias parecidas. Y el miedo que siente a quedarse solo, medio desamparado en un lugar que no conoce bien, esta dejando la caga en esta familia.
Crespito (mi marido) anda como leòn enjaulado, peor que el enano, se siente impotente de no poder hacer màs, y yo tengo que aguantarlos a los dos y patear la pena y la preocupacion, porque obvio que nadie se hace cargo de mi parte.
Tengo 3 alternativas màs, mañana voy a probar dos de ellas, la primera es empezar con la terapia de flores de Bach que me va a regalar la mamà de una compañera del Rena, despues en la terde lo voy a llevar a karate, el profe lo probò y dijo que lo llevara si o si, que tiene aptitudes de sobra para practicarlo y que a lo mejor lo ayudaba para darle seguridad. En caso de que nada de eso resulte no me va a quedar otra que buscar un sicologo infantil que me diga que mierda puedo hacer.
Me duele la guata y la cabeza de puros nervios, pero me hago la loca para que el enano no me vea asi, seguro que mañana tempranito empieza el show de nuevo, esta cuestion es agotadora, fisica y sobretodo emocionalmente.
Ya veremos como sigue la cosa, necesito mucha paciencia, mucha.

1 comentario:

M dijo...

pucha guardé este post en favoritos para comentarte cuando se me ocurriera algo pero no se me ocurrió nada :( no sé qué decirte, ojalá pronto mejore todo.